Los tres, son los artistas
ganadores de los primeros premios del encuentro de Jóvenes con FIA, Feria
Internacional Arte de Caracas, que ya no se realiza por las falta de
condiciones para un evento de esta magnitud; pero gracias a la iniciativa de la
Galería D' Museo, Banesco, el MACZUL y
un pequeño grupo de interesados hicieron posible dar continuidad a esta
confrontación anual que promueve el desarrollo de los jóvenes talentos
artísticos en el país.
Dianora Pérez, María Fabiana
Zapata y Ricardo Arispe, presentan sus propuestas “en contexto” aludiendo, pero
eludiendo mencionar la expresión “socio-política” del país.
Se agradece la buena museografía
de Alberto Asprino, pues no siempre es posible lograr la armonía para hacer
lectura a cada obra sinque se
interfieran y que por ello mismo se valorice la percepciónindividual del espacio propio que les
corresponde.
El Libro Rojo Dianora Perez 2015/Foto nusarte
El trabajo con Libros de artista
de Dianora Pérezempieza a cosechar
premiaciones a partir del 2016Con El Libro Rojo en III Bienal de Artes
Gráficas, posteriormente El Libro Blanco
se exhibe enel Salón Octubre Joven, ElLibro Dorado recibe mención especial en el 14 Premio Eugenio Mendoza y en el 2017 gana elprimer premio de la XX edición Jóvenes con
FIA con el Narcolibro.
Cada libro es un reto en cuanto a las implicaciones dela representación de las víctimas, pues cada
obra es una compilación y sistematización de las evidencias encontradas en el
fragmentario mundo de la información disponible, sobre diferentes aspectos de
las secuelas de la violencia en el país.
Este punto es relevante, ya que
mediáticamente se ha prestado a confusión a pesar de que la artista ha hecho
énfasis, que sus fuentes son la documentación ya publicada en físico y en
redes, el trabajo de investigación hace explicita
la problemática del acceso a la información y aquí la dificultad de armar el corpus
de cada libro, un trabajo de reconstrucción documental que tiene como resultado
una propuesta artística y no periodística. Un nombre que aparece en un sitio,
una declaración dada que no está en la nota oficial, una declaración por audio,
los comentarios en redesasí cada obra
es una filigrana hecha expediente de un caso particular: la represión y los
presos, la cuestionable estadística de las muertes violentas, la minería y sus
víctimas, el narcotráfico y la impunidad, como la fiesta del legado termina en
sangre.
The Lagacy -Dianora Pérez 2018 / foto nusarte
Valga resaltar el arte y no el contenido de estas temáticas,
que sin duda tienen un gran valor hermenéutico.
La manera como el arte interpela, la relación con el otro se da a través de la invitación
a la lectura, la cual tendrá que enfrentarse
con una escritura codificada (braille), y toda una simbólica de las
texturas de la escogencia en la calidad de los papeles y los obstáculos
perceptivos, como el uso de guantes, que exige al lector a tomar la decisión en la actividad
performática como participante del juego
o mantenerse como espectador ante un
bello objeto y un texto críptico.
Poesía visual, se podría caracterizar
como conceptualismo sacro, sobre todo en
The Legacyla obra que se encuentra en esta muestra. Son
relicarios ofrendas por cada una de las víctimas, y un pequeño Libro de Vida colocado sobre un tapete
de terciopelo rojo, resaltando el carácter sagrado y delicado que resulta el
asunto de la muerte.
El Libro de Vida -Dianora Pérez 2018 /foto nusarte
Nuestra vida a través de estos
libros refleja un drama lúdico, aparte quizás como epitafio, se presenta el juego de rompecabezas de piezas de madera, un
tanto más complicado de descifrar, pues no da pistas parasaber cómo armar la palabra Repúblicaescrita en braille.
Dos Querubines
María Fabiola Zapata 2018 /foto nusarte
Por su parte María Fabiana Zapata
crea una expresión neo póvera, ensamblajes escultóricos poco complacientes, reciclando
porcelanas de Capodimonte con madera y
el vaciado en concretode un vaso
plástico desechado, que de manera metafórica articulado con el título de las
obras nos irá revelando situaciones críticas que nos hablan del deterioro de
una clase social, de esa burguesía acomodada (que tenía acceso a estos adornos),
los cuales ahora rotoshan perdido su
valor , o solo son fragmentos como “La manito", vestigios de una bonanza que
luce muy lejana poder recobrar y el emblema político de la coalición unificada de
la élite política hoy ya desaparecida.
La niña adolescente
María Fabiola Zapata 2018 /foto nusarte
Enfrentarse a este estado de conciencia
en el objeto puede ser muy inquietante y cuestionador.
El embarazo precoz alarmantesiempre y más en estos tiempo de escases, es
abordado en la figurilla donde el vaso oculta el vientre de la joven madre, una
ironía melancólica, rescata con el humor, el desaliento de la bancarrota; exponiendo
y cuestionando el Kictsh del consumismo y la comodidad , un oximorón del pudor
ante la irresponsabilidad genética que nos abruma.
Los pedestales de madera resultan
precarios e inestables, aunque están perfectamente ensamblados, el resultado
visual es riesgoso para las frágiles figuras. El rancho. Compositivamente las
obras se estructuran en base al contraste de los materiales: porcelana, madera,
concreto y clavos; valorando la calidad expresiva del remiendo y de la ironía
creativa de la sobrevivencia.
Ricardo Arispe 2018 /foto nusarte
Arispe por su parte también
recurre al Kitsh de un pop de protesta, su trabajo gráfico en esta muestra presenta dos tipos de
producciones de excelente factura, los collages de los héroes y las obras
pictóricas de autores del romanticismo venezolano intervenidas sarcásticamente,
recurriendo a la fórmula del borrado de los rostros, colocándole máscaras de
gas y enlazando los temas tratados con los juegos lingüísticos de los títulos
asignados;renombrando la obra de
Michelena “ El carajito no tiene medicina” por ejemplo y las máscaras de gas estandarizadas para ser
reproducidas bajo un patrón en cartulina y armadas tridimensionalmente, con
diferentes diseños decorativos, como “nuestros
ojitos de Chávez”[i] , oel empaque de harina precocida.
Ricardo Arispe 2018/foto nusarte
Desde el punto de vista del
mercadeo y el coleccionismo el artista propone y el público dispone. Por la respuesta en puntos rojos el día de inauguración, el público escoge estos bibelot contemporáneos, especie de suvenir
de los conflictos, quizás enel mismo
ánimo un tanto epidérmico como algunos han asumido las manifestaciones,como un compromiso ritual, un evento social
para compartir, donde la empatía y la participación se produce de la misma
forma que funciona musicalmente la canción de protesta.
Es sin duda interesante aplicar desde el arte, la regla de
tres en contexto.
[i]
El grafitti oficial de los ojos del gran
hemano Chávez, que decora la ciudad, Arispe lo cambia pornuestros
ojos,múltiples miradas de la
gente. Esta máscara en particular semióticamente es una excelente
representación decómo funciona el miedo
en los regímenes totalitarios. Pero dentro del discurso se presenta como parte
de la obra serial sin otro énfasis.
Las Post cards de Vasco Szinetar, presentadas en el Espacio Zero con la curaduría de Lorena González son las de un pintor fotógrafo, que congela la
imagen pictórica, asentada en la ciudad.
Es poesía visual .Me conecto que el
imaginario de los años 60 : Jacobo Borges, surge un paralelismo con las imágenes recientemente presentadas en mayo –junio en la sala TAC curada por Douglas Monroy titulada El ojo de la Ballena en una muestra antológica de Daniel González quien también sitúa a ese solitario ser
humano en el escenario urbano de Caracas , acompañado por lo general de un
texto, un grafiti un cartel publicitario, que complementa semánticamente la
ubicación de los personajes y nos rescata con el humor de la sórdida situación que
nos revela el encuadre, o enfatiza el comentario y complementa el título con toda su intención poética.
Vasco Szinetar 2018
Vasco Szinetar 2018
Daniel González 1960
Jacobo Borges 1960
Vasco Szinetar 2018 /foto de la foto nusarte
Las imágenes dentro de una
estética informalista, que recurre a los materiales más diversos, reciclándolos
pues la precariedad y la creatividad deben resolverse artísticamente. El
interaccionismo simbólico a la vuelta de algunos años genera una polifonía de
interpretaciones, en torno a la soledad y el desamparo. Franklin Britoquien este 30 de Agosto cumplirá 8 años de haber fallecido, su performance cada
día cobra mayor relevancia ante la barbarie infligida por el poder y la falta
de solidaridad de los grupos políticos, ecológicos y culturales que debieron
apoyarlo ,de la misma manera que ocurrió con Oscar Pérez. Propios mártires de
una guerra inaudita.
La composicióndialógica propuesta de Brito y el pan por una
parte y Oscar Pérez y los guerrilleros cuando fueron masacrados, resuenan como
imágenes religiosas, que revisten el culto de quienes entregaron su cuerpo, lo
dieron todo…El cordero de Dios…Chivos expiatoriode una gran indiferencia social, una postal
que indudablemente debe viajar en el tiempo y estar fresca en la memoria, para
polemizar sobreel amor, los ideales, la
comunicación y la deshumanización de la incoherencia
política.
Siempre ha
sido difícil, vocacional, filantrópico, el fomento y mantenimiento de
actividades artísticas, mucho más en este tiempo de guerra; y no se puede
menoscabar la labor de instituciones como la Fundación Mendoza, pero no por
ello, debo caer en la muy presente autocensura para callar mis dudas y mis
sabores amargos ante situaciones en los circuitos de distribución de la
producción artística. Este premio es importante, para los jóvenes artistas,
constituye una motivación y estímulo.
El 14 salón es
esperanzador porque refleja la labor de los artistas que en su mayoría viven y
generan su producción en este, llámese campo de concentración o campo de batalla. Desde aquí oigo las cotufas, como
eufemísticamente le llamo al sonido de
las ráfagas y disparos aislados (desde hace más o menos unos 10 años).
La economía de
medios es parte de la crueldad que
impone el momento, y creo que esta limitación engrandece cada una de las
propuestas presentes en esta muestra, digna de una detenida mirada, resulta también una didáctica de los procesos creativos,
especialmente de los artistas como investigadores y fabricantes de realidades,
que nos rebotan complejamente como un juego de pinball, a las muy diversas
relaciones que nuestra percepción consiente e inconscientemente elabora a
partir de sus obras.
Y creo
ineludible en el arte la condición de homo faber-ludens, sin buscar, tensión de
polaridades, sino como característica de la actividad artística y los tramados
categoriales que tejemos quienes
transitamos también las teorías del arte.
Muy
relevante el apoyo de seis importantes especialistas que trabajan en diversos
escenarios internacionales, resulta muy
relevante la promoción para el arte joven venezolano: dar a conocer nombres,
proyectos, de los artistas que enviaron sus propuestas y un aval para quienes
resultaron seleccionados, contar con los
textos curatoriales de tan sobresaliente grupo de curadores
Ante esta
situación de carestía, la sala realizó
un excelente esfuerzo museográfico, donde las piezas dialogan bien en el espacio, quizás en la
entrada son cuatro propuestas y pueden
resultar un poco apretados los campos visuales, pero como tres de ellas se
aprecian de manera intima, acercándose para ver detalles, no se invaden
perceptualmente.
Se agradece la
publicación del acta del veredicto del jurado, lo que debería ser costumbre en
los certámenes artísticos, pero lo general es saber sólo los nombres de los jurados
y de los premiados
Cuando se lee el acta del jurado del premio del 14 Salón Eugenio Mendoza,
uno como docente de arte, como artista, como crítico, como persona común
y corriente entra en crisis frente al
problema ontológico de la obra y se sorprende por la docilidad de todos los
artistas participantes y en especial del premiado ante la recomendación que
hace el jurado sobre su obra.
Se supone que
una obra de arte, ni le sobra, ni le falta nada, es perfecta en su ser, a menos
que la intervención, la modificación de la propia obra esté dentro de la
propuesta artística, pertenezca a su
esencia ; no siendo ese el caso ¿Cuáles
son los parámetros de idoneidad en la
evaluación de mérito de una obra, cuando esta es objetable ? ciertamente el campo de los juicios de valor , es un
campo minado, donde la subjetividad perceptiva e interpretativa juega un papel
preponderante, es por ello que este tipo de
deliberaciones se realiza entre varias personas y por lo general en
número impar.
Semioticamente,
se convierte en algo bastante engorroso
de dilucidar. Dado que cada uno de los elementos que compone la obra tiene un
carácter significante y significativo, al objetar el dispositivo de exhibición
(no la obra), se infiere que el artista no pudo resolver su proyecto completamente.
Entonces no se premia la obra, sino el
proyecto; ¿la obra resulta accesoria?
Si bien el
discurso y las formas están en el mismo campo del significante, y no en
opuestos como algunos sugieren, confundiendo el término discurso, con retórica;
pero entiendo la preocupación, ya que lo que sí es insostenible, es un discurso que no corresponde a la forma, el “como lo digo”
es lo que da el carácter y la particularidad del discurso.
Las bolsas son
signos, en estos momentos en Venezuela, denotan
la situación de escases alimentaria y colocadas sobre esa rústica
mesa de madera, explicita más la situación de indefensión, inseguridad de
consumir el sustento mínimo ante la ausencia de los productos básicos, pero
resulta ser que la mesa no es parte de la obra.
El
cuestionamiento de la mesa, resulta también tener un potente contenido
semántico, ya que en términos de la política nacional, la mesa alude al sector
de la oposición unificada… -no se trata de esa mesa, pero el azar es objetivo.
¿Por qué es inapropiada la mesa? ¿Cómo debe ser la mesa? ¿Aun así la pieza
permanece tal cual, se asume que la modificación sugerida se tomará en cuenta
para otra oportunidad?
Ante este
problema, de tener que premiar una obra con la que el jurado manifiesta no
estar formalmente de acuerdo, existiendo otras, que no presentaban esta
dilemática ontológica; inclusive haciéndose dos de ellas merecedoras del reconocimiento, se decide
premiar la obra, que a su criterio, hay
que hacerle una “corrección”, debe ser de otra forma y queda refrendado en el
acta tal discrepancia en cuanto a la manera en cómo está exhibida; y esto se me
hace complicado de entender y ahora
mucho más de explicar cuando afronte el concepto de esencia, hablando de la
materia y forma en la obra artística.
Las
posteriores declaraciones a la prensa nacional que dio el artista galardonado, destaca el hecho
performatico del material visual, “a partir del ensamblaje de bolsas que habían
sido utilizadas previamente por revendedores de alimentos”, pero luego dice”“Yo lo que hacía era proponerles un intercambio, yo les daba
una bolsa común y ellos me entregaban la que estaban utilizando para cargar lo
poco que habían podido comprar”, ambas
declaraciones son dos propuestas de acciones diferentes, de esta última me
resulta una situación bastante forzada, lo que le aumenta mi interés a las respuestas de los interceptados en la acción.
Pero, todo el
énfasis performatico del material, esa
“historia del material” queda oculta, encriptada y al parecer es irrelevante. No
sabremos nada de las reacciones de un público al que se le intercepta y le puede incomodar o no, la sugerencia de cambiar una bolsa por otra
sin ningún beneficio. El receptor en contacto con la obra no puede llegar a
conocer del estado de las bolsas, pues se encuentran amarradas, a menos que de otra
manera sea informado de ello, es decir debe recurrir a la previa o posterior
lectura del texto del proyecto tener conversación con el artista o algún
informante allegado por ejemplo.
La mesa sola funciona
semánticamente, ¿pero el ensamblaje de las bolsas sin la mesa? …. ¿cómo y dónde deben estar colocadas las bolsas? ¿Cambiará
la lectura de la obra si modifico su
dispositivo de exhibición?
¿Importa acaso
lo que sucede con el público y su
interacción con las obras?, o ¿hay que asumir un gusto direccionado, ver lo que nos dicen que tenemos que ver, como
en el cuento del emperador que estaba desnudo.
Otro aspecto
que me llena de incógnitas es el elogio por nosobre determinarse ¿por qué esto es un hecho que merezca reconocimiento?
Son
fascinantes los juegos lingüísticos en los textos de arte. El término
sobre-determinarse venido del
psicoanálisis y empleado en política y
sociología por Althusser, es una de esas palabras difíciles de aprehender
porque devienen de la complejidad que encierra su significado; simplistamente
sobredeterminarse sería: la capacidad de
colocarse capas, de solaparse y de complejizarse: que cada parte sea a la vez
el todo y particular al mismo tiempo.
Mucho más
difícil de pensar es el ejercicio que propone el jurado al decir “que no se
sobredertemina” y allí mi duda de lo que estoy entendiendo, no resulta un
elogio.
De los 12
artistas 10 propuestas sintetizan una
visión de esta llamada situación país enla que nos encontramos los venezolanos
de estos tiempos, entonces las propuestas
de los otros dos artistas centradas en una problemática formal de la
fotografía, ¿estarían fuera de concurso? ¿Tiene una línea editorial el salón
obedeciendo a directrices mediáticas de
la super estructura?
Vivimos una
economía de guerra creada por el gobierno al destruir el aparato productivo,
forzada internacionalmente por razones políticas se le conoce como “guerra
económica”, razones imperiales todas y de todos los imperios, que salen a
relucir con el brillo de los minerales por ejemplo , es una temática más oculta pero no por ello
menos álgida y los artistas nos la hacen visibles y uno puede transitar los vericuetos a los que se puede llegar a
través de los sellos, y la escritura braille de un libro, donde también se resolvió
con economía de medios y sin monumentalidad;
dos característica en las obras de toda
la muestra.
Muy rigurosa
también resulta la síntesis de los
pentagramas silenciosos de nuestro himno nacional, la visualización sonora de
la impunidad y la complicidad de los actores sociales ante
la pérdida en general y particularmente se alude a ese país perdido, aquel
donde se diseñaban estampillas y existía un coleccionismo filatélico, por
supuesto hablamos de años atrás, cuando aún
no existía el e-mail y la comunicación epistolar recurría al correo postal.
Obras que
refieren a situaciones personales: las cartas, las postales, los recuerdos pintados,
los objetos ensamblados, dentro de un contexto histórico de una modernidad hoy en acelerado proceso de
deterioro. Haciendo crónica de esta actualidad, empleando el concepto de
registro etnográfico, con humor en la apología simbólica identitaria, que
muestra los documentos de la interacción lúdica. La visualización
de la determinación del nivel de vida de una población de clima muy
cálido, en la metáfora de una planta que depende de la electricidad, del agua
residual de un aire acondicionado.
En ese sentido
quien más se acercase a esa línea se
aproximaba más al discurso deseado, a la contradicción económica
sobredeterminada. La propuesta premiada, nos enfoca en la cotidianidad de la
continuada y desgastante búsqueda de alimento referida a la especificidad
histórica de Julio-Agosto 2016 y subrayar
este asunto de contingencia humanitaria siempre será relevante.
No sé si el acta buscaba sacudir, activar la polémica; pero a la fecha es
abismal tanto silencio, aunque pasa,
nada pasa, todo es excesivamente normal.Como artista, debo destacar que discurso más contundente, me parece el acta de premiación, porque
expresa el conformismo y la precariedad en los niveles más altos. Nancy Urosa Salazar Artista docente investigadora Dra. en
Cultura y Arte para América Latina y el Caribe
Los curadores encargados de la selección de los proyectos para
esta edición son Emiliano Valdés (Guatemalteco, curador en jefe del
Museo de Arte Moderno de Medellín, Colombia), Gabriela Rangel (Venezolana,
directora de Artes Visuales y curador en jefe Americas Society, Nueva York,
EEUU), Isabela Villanueva (Venezolana, curadora independiente radicada en Nueva
York, EEUU), José Luis Blondet (Venezolano, curador de proyectos especiales de
Los Ángeles County Museum of Art, EEUU), Lisa Blackmore (Británica, curadora y
artista independiente radicada en Zurich, Suiza) y Magali Arriola (Francesa,
curadora independiente radicada en México, DF, México)
Participantes: Eduardo Vargas Rico, Rosa Chávez, María Fabiana
Zapata, Rosario Lezama, José Joaquín Figueroa, Rafael Serrano, Esmelyn Miranda,
Paola Nava, Dianora Pérez, Samuel Yanes, Daniel Medina y Katiuska Angarita.
El jurado encargado del veredicto : Sofía
Hernández Chong-Cuy, Eliseo Sierra y Luis Lizardo.
Reconocimientos:
Premio Salón Eugenio Mendoza # 14 Esmelyn Miranda Orozco
disfrutará
de una residencia de tres meses
en el centro Lugar a Dudas en
Cali,Colombia
Menciones honoríficas: Ficción postal Daniel Medina El libro dorado de Dianora Pérez.